jueves, 2 de febrero de 2012

He sido lo que has querido que sea.

"Buenos días princesa", esa es la frase que estás loca por escuchar al borde de la cama y también es la frase que estoy loco por pronunciar. Podríamos, no sé...hacer un trato; tú intentas salvarme y yo me dejo. No opondré resistencia alguna, haré lo que tú digas, iré donde tú vayas, iremos a la par como me juré cientos de veces. Podríamos hacer mil cosas; salir de noche al parque dónde te escribí tantos poemas, borracho debatiendo con la luna. Contarte mis hazañas, mis penurias, arrancarte todas las sonrisas que pueda...ser felices al fin y al cabo. Quizás demasiado feliz, me encantaría llegar al punto de pensar que estoy viviendo un sueño y no despertarme nunca... No es mucho pedir; podrías lograrlo fácilmente.
Es esa frialdad en ciertos momentos la que me mata. De poco sirve que te digan que te quieren si no te lo demuestran de la manera que deseas. Yo me he matado por ti, me he implicado como no me he implicado con alguien jamás, te he esperado cuando no te esperó nadie, he sido tu saco de lágrimas, en definitiva...he sido lo que has querido que sea. Ahora me toca a mí en parte exigir. No me temblará la voz cuando te diga lo que pienso, ni tendré ningún reparo en sostenerte la mirada el tiempo que haga falta. Sigues igual, pero el tiempo ha pasado para ambos y mis necesidades han cambiado. ¿Se estará acercando un ultimátum? quién sabe.

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